LA MÚSICA AMANSA A LAS FIERAS

  • 16 agosto, 2017

Es un dicho popular que la música amansa a las fieras. 
Indudablemente la música tiene efectos potenciadores de determinados estados de animo.

Aristóteles y Platón ya defendían la gimnasia como disciplina del cuerpo y la música como disciplina de la mente.

Es sabido el efecto que los tambores tuvieron en las batallas antiguas, amedrentando al enemigo con su ruido y organizando la marcha y arengando a los guerreros. 

Los tambores que marcaban el ritmo en las galeras, en los desfiles, en las regatas.
Los violines, el piano, los sonidos suaves que nos evocan la música de la naturaleza, que nos invitan al romanticismo y al amor.
Las guitarras eléctricas, la batería del rock que nos incita a la acción y al movimiento….
La música con sus ritmos y percusiones que nos recuerda al latido del corazón materno y nos calma o nos mueve según su compás sea lento o rápido. Las nanas, el vaivén del cuerpo de la madre que nos retrotrae a la seguridad del útero materno y su movimiento al andar…
La música no solo calma a las fieras, nos influye a todos y todas y nos puede ayudar en determinados momentos a mejorar nuestro estado de animo. Cada cual debe encontrar sus ritmos, su ISO (identidad sonora) y utilizarlos en cada momento para conseguir un efecto.
Probáis?